
y es que hace unos meses se puso en contacto conmigo la marca Lekué y me enviaron por navidad un molde de silicona con el número 1, que es una verdadera pasada… no es el primer artículo que tengo de esta marca, y desde luego, tampoco será el último… en breve, esperemos que pueda ver la luz una cosita Lekué también… ;))
para estrenar este molde me he decidido por este bizcocho de naranja caramelizada con vainilla y almendra, ya que son los sabores favoritos del rey de la casa.. y como él es nuestro número uno… pues eso, lo que estáis pensando todos pero más!!! jajjajajaj y es que este chico que tenemos en casa vale mucho!! ;)
no os preocupeis los que no tengáis un molde Lekué, podéis hacerlo mientras en unos moldes individuales y os quedará también muy chulo!!
-una naranja grande limpia y cortada en láminas muy finas
-125ml de agua
-200g de azúcar
-una vaina de vainilla
ponemos en una sartén el agua con el azúcar a calentar, y cuando esté disuelta añadimos los gránulos que están en el interior de la vainilla y las rodajitas de naranja. dejamos caramelizar una media hora, hasta que la piel de la naranja esté blandita.
disponemos las rodajas de naranja en el fondo de nuestro molde y reservamos el líquido que sobra, por si luego queremos emborrachar el bizcocho, aunque no le hace falta!
si no teneis un molde Lekué, seguramente necesiteis engrasarlo antes de nada.
-4 huevos
-200g de azúcar
-1 cucharada de extracto de vainilla líquida
-165g de harina +media cucharadita de levadura química
-150g de mantequilla derretida
-115 g de almendra molida
batimos los huevos, el azúcar y la vainilla con la batidora de varillas durante unos 5 minutos, hasta que doble el volumen.
añadimos la harina previamente tamizada y la incorporamos con unas varillas de mano.
a continuación añadimos la mantequilla y la almendra. mezclamos bien y lo echamos en el molde, encima de las naranjas.
llevamos al horno, previamente precalentado a 160ºC y horneamos hasta que esté cocido. lo sabemos cuando pinchando con un palillo el bizcocho sale limpio.
dejamos enfriar y desmoldamos, para que se queden las naranjas a la vista.